C ada reloj Rolex se diseña, fabrica y somete a pruebas con una atención constante al más mínimo detalle. Este enfoque «superlativo» se expresa a través de ocho cualidades fundamentales que caracterizan cada reloj Rolex: precisión, hermeticidad, autonomía, robustez, sencillez, artesanía, comodidad y durabilidad.
Cada reloj certificado como Cronómetro Superlativo viene con el sello verde y acompañado de una garantía internacional de cinco años.
La promesa de un reloj excepcional
Estos grandes principios técnicos y estéticos siempre han guiado el trabajo de la manufactura Rolex. También brindan al usuario la experiencia de un reloj excepcional, cuyas características expresan la excelencia de un savoir-faire único. La singularidad de la manufactura Rolex se expresa en la promesa de una fiabilidad inquebrantable. Es un compromiso de confianza entre la marca y sus usuarios, simbolizado mediante el sello verde y acompañado de una garantía internacional de cinco años. Dentro del Control Superlativo, la unidad interna que pone a prueba todos los relojes antes de salir de la manufactura, los requisitos son extremadamente estrictos. El relacionado con la precisión cronométrica supera incluso los estándares vigentes en la industria relojera.
Pero esta determinación inquebrantable también se expresa a lo largo del proceso de fabricación. Para garantizar el rendimiento del reloj una vez montado, se realizan controles meticulosos y constantes en cada etapa de este proceso, desde el primer esbozo al montaje final, pasando por el almacenamiento de los componentes, que se gestiona mediante un sistema totalmente automatizado. Estos exigentes estándares también se observan en la comunicación constante que existe entre los distintos departamentos. Por ejemplo, las necesidades y contratiempos de los relojeros del servicio posventa forman parte integrante del proceso de creación, desde la fase de diseño.
Más que una firma, una mentalidad
La firma «Superlative», que figura hoy en las esferas de los relojes Rolex, es mucho más que una promesa de calidad y fiabilidad. También es una mentalidad perfeccionista que impregna cada departamento de la empresa e impulsa a todas las personas que trabajan para Rolex, independientemente de su cargo.
Rolex siempre ha perseguido una búsqueda perpetua de la excelencia, superando sin cesar los límites técnicos y tecnológicos en la producción y los controles de sus relojes para garantizar su excelente rendimiento. Esto ha sido posible gracias al esfuerzo humano e industrial constante, basado en un permanente cuestionamiento de lo que se ha aprendido y la constante mejora de técnicas, herramientas y pruebas. Esta innovación es inherente a la marca, como lo demuestran las numerosas solicitudes de patentes presentadas por Rolex desde su creación.